
Ella y su familia se escondieron en la ciudad de Amsterdam, en la parte de atrás de una fábrica de galletas.
Ahí estuvieron escondidas dos familias durante dos años, tras esos dos años fueron descubiertos y llevados a campos de concentración, concretamente al de Bergen-Bersel en marzo de 1945, todos murieron menos Otto Frank, el padre de Ana.
Este libro me ha gustado porque además de ser interesante, produce diversas emociones de tristeza y de ternura porque es un libro muy personal escrito más o menos por una chica de mi edad.
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